Un médico joven y exitoso regresa a su ciudad natal de Nueva Inglaterra para darle el último adiós a un viejo amigo. Éste, debido a sus dolor, le pide que para terminar con su sufrimiento, le procure la muerte (una eutanasia, pues, en toda regla). Una vez llevado a cabo tal acto, son tales los remordimientos del doctor que decide evadirse y envolver su conciencia con el 'alivio' del desenfreno que le proporciona la compañía de muchas mujeres... Pero, claro está, lejos de hacerle olvidar, eso sólo va acrecentando su tormento interior.