Para Anna, una niña de nueve años, la vida se desarrolla apacible y confortablemente entre su escuela religiosa y la casa de sus padres, Marie y Fernando. La única sombra la representa un tío que lucha contra el franquismo en España. Es comunista y de él no se debe hablar en familia. Finalmente, la detención y la muerte de este tío, un viaje a Chile y algunos encuentros, acontecimientos cuya importancia Anna no percibe, transformarán profundamente a sus padres y enriquecerán su visión del mundo.