Basada en hechos reales. Kate Barker (Shelley Winters) crió a sus cuatro hijos de forma autoritaria, pero era demasiado indulgente con sus fechorías. Ellos la veneraban, pero sobre todo la temían. Cuando los chicos se hicieron mayores, Kate abandonó a su débil marido y partió con ellos en busca de fortuna. Así comenzó para los Barker una vida dedicada a la delincuencia y al crimen que hizo que fueran perseguidos sin tregua por la justicia. Ma Barker fue una de las figuras más insólitas en la época del gangsterismo norteamericano.