Nueva York, 1979. Shane O'Shea, un chico de 19 años, guapo y que lleva una vida monótona y anodina, sueña con poder entrar una noche en la discoteca Studio 54 de Manhattan. Se trata de un local muy exclusivo, donde sólo admiten a famosos. Una noche, el propietario del negocio, ve a Shane en la cola y ordena al portero que lo deje entrar. Le gusta y le ofrece un trabajo en el local. Allí, se iniciará Shane en el mundo de las drogas, el sexo y la música disco. Como otros muchos jóvenes aspira a codearse con la gente del mundo del espectáculo, con la esperanza de poder hacer realidad sus sueños.