Fundada en California, en 1966, por un exorganista y domador de leones llamado Anton Szandor LaVey, la controvertida Iglesia de Satán siempre ha estado sumida en el misterio, envuelta en escándalos y asediada por prejuicios morales. Una mirada inquisitiva a uno de los fenómenos más fascinantes del pluralismo religioso estadounidense.