Durante la brutal batalla de Berlín en 1945, cien mil civiles alemanes lucharon a muerte y seis mil se suicidaron. ¿Cómo lograron los nazis motivar a personas normales para que siguieran luchando, incluso cuando la derrota era ya inevitable? La respuesta es la propaganda, y Hitler encontró un genio de la manipulación de masas en el doctor Josef Goebbels. Este episodio nos muestra ejemplos de la maquinaria de propaganda nazi, lis vestigios de un siniestro pero eficaz lavado de cerebro a todo un país.