Zee y Roe se dirigen hacia el sur para interceptar a un narcotraficante, sin saber que el gobierno les ha enviado un modelo nuevo y mejorado del proyecto del Zeta. Bucky también se apodera de la información y va a su encuentro. Los esfuerzos de Zeta para detener al capo de la droga se complican debido al robot asesino que sigue su rastro, el cual posee todas sus habilidades y una fuerza superior. Al final, Zeta aparentemente logra destruirlo, pero cuando regresan a los Estados Unidos, el robot de rastreo comienza a repararse.